No tuvimos la suerte de conocernos.
tus ojos fueron esas esferas brillantes que irradiaban seducción en la necesidad de amarme, sólo fue un instante sobre el tiempo necesario para una eternidad por recordarte. El mundo giraba alrededor de tú sonrisa, no existía nada lo suficientemente llamativo para perder el trance hipnótico de tú presencia entre la multitud de la fiesta, te amé, y fue tan intenso como real dentro del esbozo imaginario proyectado por mi cabeza. No me atreví a decirte nada mientras pasaba un desfile de pretendientes que te cortejaban, entre tanto, no parabas de observarme camuflada bajo el juego de luces y sombras que nos narcótizaba. El alcohol residente en nuestras venas se acumulaba como un torbellino que no nos ayudaba, portabas una preciosa sonrisa que era capaz de consumir el tiempo transportandome a una catarsis de acontecimientos nunca producidos en esta presente realidad, pero si llevada a cabo en algún mundo paralelo que aún esta por despertar.
Se que mi timidez me llevó a no personarme dentro de tú circuló de seguridad, pero no fue un caso perdido, pues me sirvió de percutor para nunca más repetir este absurdo comportamiento que me recluye en esta isla de soledad por no ser el valiente que no confía en si mismo y su capacidad.
Dedicado a tod@s que no fueron capaces de dar aquel primer paso que les acompañó muy a su pesar...
Zoca...timidez...
tus ojos fueron esas esferas brillantes que irradiaban seducción en la necesidad de amarme, sólo fue un instante sobre el tiempo necesario para una eternidad por recordarte. El mundo giraba alrededor de tú sonrisa, no existía nada lo suficientemente llamativo para perder el trance hipnótico de tú presencia entre la multitud de la fiesta, te amé, y fue tan intenso como real dentro del esbozo imaginario proyectado por mi cabeza. No me atreví a decirte nada mientras pasaba un desfile de pretendientes que te cortejaban, entre tanto, no parabas de observarme camuflada bajo el juego de luces y sombras que nos narcótizaba. El alcohol residente en nuestras venas se acumulaba como un torbellino que no nos ayudaba, portabas una preciosa sonrisa que era capaz de consumir el tiempo transportandome a una catarsis de acontecimientos nunca producidos en esta presente realidad, pero si llevada a cabo en algún mundo paralelo que aún esta por despertar.
Se que mi timidez me llevó a no personarme dentro de tú circuló de seguridad, pero no fue un caso perdido, pues me sirvió de percutor para nunca más repetir este absurdo comportamiento que me recluye en esta isla de soledad por no ser el valiente que no confía en si mismo y su capacidad.
Dedicado a tod@s que no fueron capaces de dar aquel primer paso que les acompañó muy a su pesar...
Zoca...timidez...
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